ADRIAN GONZALEZ DA COSTA - POR EL SUEÑO AFUERA
CICUS , UNIV. DE SEVILLA, 2014
Adrián Gonzalez da
Costa, (Lepe,1979). Licenciado en filología hispánica por la Universidad de
Sevilla . Tiene el premio Adonáis (2002)
y el Opera prima (2004) de la Asociación de críticos de Andalucía por "Rua
dos douradores", un libro primerizo donde Kavafis, Vallejo, Blas de
Otero y Fernando Pessoa forman el espejo donde busca su propio rostro. Alterna
creación y recreación, así ha volcado al español una antología de poetas
portugueses para el ayuntamiento de Ayamonte durante el 2003, dentro del III
Festival de Música Internacional de esa ciudad.
A decir del jurado X Premio Andaluz de
la Crítica su obra poética se inscribe en la tradición de
Pessoa, “una poesía de la experiencia que
no renuncia a elementos surrealistas y en la que destacan la ironía, la madurez
y los versos bien medidos que dan lógica al sinvivir".
En Papel–Literario dice
José García Pérez: “La poesía de González
da Costa es tan inquietantemente estremecedora que su discurso dispara la
nostalgia del encuentro con uno mismo”.
Ahora nos presenta “Por el sueño afuera”, Premio de Poesía
de la Universidad de Sevilla, un bello
poemario que consolida la pujante trayectoria de este joven poeta. De hermosa factura y pulcra escritura, en la
que las imágenes vuelan en metáforas extraordinarias: “De su letra sin fondo, rozándome la cara/ se eleva un
vuelo de aves fugaces como un sueño,/ suaves como el humo sumiéndose en
la noche/7 y oscuras como pétalos en un cuenco de vino.” Vuelo en el que
está presente la admiración hacia: “Ella
domina el vuelo nocturno de las aves./ La siguen los planetas como perros en
celo./ Desde lo más profundo, las distancias le cantan/…”Y el recuerdo emocionado hacia la madre : “Esa mujer que hoy por vez primera / cumple
cincuenta y tantos años, tuvo veinte en la boca./…” Y desde el recuerdo a
la decepción, en un lenguaje hondo y metafísico, que , efectivamente, trae visos
de Pessoa: “La manzana que muerdes guarda
al fondo un gusano. /El jardín que te gusta tiene un ábol prohibido/…”.
Con una métrica
adecuada al contenido, en la que predominan los endecasílabos, incrementa en
este bello poemario su anunciada madurez, pudiendo entrar con esta obra en la
nómina de los excelentes poetas jóvenes que son capaces de hacernos volar en
busca de esos sueños.
F.Basallote